Poco a poco, el mapa de los vinos de Baleares empieza a completarse con etiquetas interesantes incluso en aquellas islas donde durante décadas la producción vinícola fue drásticamente marginada por los efectos de boom turístico.
A diferencia de Mallorca, donde el cultivo de la vid ha pervivido incluso en los momentos más críticos –y hoy las bodegas abundan: la cifra alcanza el centenar– en Ibiza, Formentera y Menorca esta actividad estuvo al borde de la extinción: durante buena parte del siglo XX, las uvas solo se vendimiaron para autoconsumo, y el capricho de encontrar un vino local para acompañar una caldereta de langosta era poco menos que un sueño imposible.
Pero en los últimos años el panorama ha dado un vuelco. Y han aparecido sorpresas por doquier: si en la diminuta Formentera y en la frivolizada Ibiza ya se están produciendo vinos ciertamente dignos, en Menorca, que tiene una tradición agrícola más rica y mayor superficie, deberían superar ese listón.
Y así es: en la isla funciona ya más de una decena de pequeñas bodegas –nueve de ellas afincadas en el sur–, cultivando cerca de 70 hectáreas de viñedo. La pionera, Binifadet, surge de la pasión de Carlos Anglés, que en 1979 comenzó a experimentar con clones de variedades foráneas que trajo del Penedès y en 2001 estableció su bodega. Hoy le secunda su hijo Luis, elaborando vinos tan singulares como este Pieles 2018 que aquí nos ocupa. Seguramente el más raro de la gama de la casa, porque amén de ser monovarietal de chardonnay –la gran especialidad de Binifadet– es un vino naranja; es decir, un blanco elaborado como un tinto: macerado y fermentado con los hollejos de la uva, con crianza posterior en tinaja de barro, lo que contribuye a acentuar su complejidad aromática y volumen. Aunque sin perder la elegancia, el carácter ni la calidez mediterránea que definen su perfil. Un vino seductor y diferente que invita a soñar en un futuro esperanzador para la renacida viticultura de Menorca.
Arrayán, bodega puntera en la DO Méntrida, renueva la imagen de su blanco de albillo…
Izadi presenta uno de los raros blancos calificados como Viñedo Singular en la DOCa. Rioja,…
Scala Dei, que en 1974 embotelló el primer vino certificado por la D.O. Priorat, celebra…
Benjamín Romeo presenta la última añada de su blanco más joven y asequible, que aporta…
El inquieto Matías Michelini firma este vino afilado y singular, que pone en foco la…
En uno de los escasos viñedos de Guadalajara, Finca Río Negro da a luz a…