Ruuuts 6 es un espumoso toledano sorprendente. Y no solo porque su consumo contribuya a reforestar Cantabria, tal como han previsto los mentores de esta iniciativa pionera para combatir el cambio climático, concebida bajo principios innovadores y rigurosamente sostenibles, que más adelante detallaremos.
El espumoso que corona la gama de seis referencias que acaba de estrenar Ruuuts sorprende porque no es habitual encontrar en esta zona del viñedo de Castilla-La Mancha vinos burbujeantes, elaborados con el método tradicional champenoise, de una calidad contrastada. Que incorporen variedades locales –como macabeo (50%) y airén (30%), en este caso– asociadas a la noble chardonnay (20%), un comodín socorrido pero eficaz en tantos espumosos del mundo. La crianza de 30 meses y un dosage sutil –para el que se ha empleado un vino oxidativo de la zona– dan como resultado un vino de burbuja alegre, con alma y frescura, que se bebe con ganas y sin complejos y puede encontrar muchos aliados en la mesa.
En cualquier caso, lo mejor de Ruuuts 6, al igual que el resto de sus compañeros de gama –Ruuuts 1 y 2 son blancos jóvenes, de variedades autóctonas (albillo, airén y macabeo); 3 y 4, tintos ligeros, también de uvas locales (tempranillo, garnacha y otras), mientras que el 5 es un tinto con crianza en barrica, que incluye además de tempranillo y garnacha, un porcentaje de syrah–, es el innovador proyecto que les respalda.
Inspirado en el concepto de Gesamtkunstwerk, que el compositor Richard Wagner acuñó para referirse a una «obra de arte total», que integraba todas las artes, en la que cada pieza debía ser una obra de arte en sí misma, el equipo impulsor de Ruuuts, liderado por el sumiller Francesc Nicolás, comenzó a desarrollar en el año 2020 un proyecto vinícola de economía circular fundamentado en tres pilares: vinos de calidad, innovación y sostenibilidad. Siguiendo las premisas de Wagner, los estándares de calidad en las tres áreas debían ser las más exigentes para llegar a los objetivos planteados.
Gracias a ello, tres años después, Ruuuts ha conseguido presentarse en el mercado con unas señas absolutamente innovadoras. Los seis vinos que conforman la gama responden a los términos de sostenibilidad que plantea el proyecto, elaborados a partir de viñedos históricos, con métodos de agricultura ecológica y con mínima intervención.
Todos los vinos de Ruuuts proceden de un viñedo localizado en Toledo, donde se vinifican, se crían y embotellan, en envases de vidrio ligero para procurar generar el menor impacto medioambiental posible. Lo mismo sucede con las etiquetas, de papel sostenible. En cuanto a los tapones, son de origen vegetal, derivados de la caña de azúcar y con huella de carbono cero. Y se prescinde de las cápsulas para evitar el uso de aluminio o plástico. El compromiso «verde» de Ruuuts está, por supuesto, certificado: sus vinos llevan el sello de agricultura ecológica de la Unión Europea, así como el Vegan de V-Label, líder mundial en auditoría y certificación de productos vegetarianos y veganos.
Si la comercialización de estos vinos es original –las seis referencias de Ruuuts pueden adquirirse en la página web del proyecto, a través de planes de subscripción, o por medio de sus distribuidores en Madrid y Barcelona– no es menos singular la iniciativa que han impulsado sus mentores para contribuir a reforestar Campoo de Yuso, en Cantabria.
En este proyecto, que da fe de la voluntad de ser partícipes activos en la lucha contra en cambio climático, Ruuuts colabora con la ONG Trees 4 Humanity y actúa en nombre de sus clientes a través de la plantación de un árbol por cada caja de vino que llegue al mercado, responsabilizándose de su cuidado durante los tres años posteriores, para garantizar así la máxima supervivencia de los árboles que se planten.
El plan tiene como objetivo recuperar el paisaje, absorber y compensar el CO2 para producir oxígeno, purificar el aire, fertilizar y regenerar los nutrientes del suelo degradado, evitar la erosión de las lluvias, mantener los ríos limpios, captar agua para los acuíferos, facilitar refugios para la fauna y reducir la temperatura media del suelo. Con este fin, Ruuuts se ha marcado como meta para 2028 plantar 100.000 árboles en nombre de sus clientes. Todos ellos tendrán acceso a un certificado virtual con la cantidad de árboles que se han plantado en su nombre junto con el cálculo de CO2 absorbido.
Eso es comprar vino (y bebérselo) por una buena causa, sin duda.
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