Estos son los restaurantes favoritos de Aduriz en Guipúzcoa. A los que va a comer en familia o con los amigos de la cuadrilla. Locales nuevos o de toda la vida que conocen bien muchos de sus paisanos.
C/ Fermín Calbetón, nº 4. San Sebastián. Guipúzcoa. Precio medio: 40 euros.
Un clásico de Donosti en el corazón de la parte vieja. Cocina tradicional en un ambiente desenfadado para el que no se necesita protocolo. Es uno de los sótanos gastronómicos más populares. Entre los platos que han hecho historia la lasaña de anchoas, pero también buena chuleta. «Me gusta pedir cosas muy nuestras, como la merluza rebozada o el bacalao, recetas sencillas que me conectan con las raíces de lo que somos».
Portuetxe Kalea, 43. San Sebastián. Guipúzcoa. Precio medio: 60 euros.
Situado en las afueras de San Sebastián, a espaldas del Monte Igueldo, es un asador marinero de los de toda la vida. La única opción para comer carne es pedir la chuleta, que se cobra al peso. Los reyes de las parrillas son los pescados de temporada. Entre las especialidades de la casa los chipirones a lo Pelayo (guisados con cebolla pochada) y el besugo «pero lo que más me gusta son las piparras fritas, una debilidad». En temporada preparan buenas setas y merece la pena probar los entrantes que se ofrecen fuera de carta.
Zabaleta Kalea, 28. San Sebastián Guipúzcoa. Precio medio: 35 euros.
No todo va a ser cocina vasca, de vez en cuando hay que cambiar el chip y comerse «un buen pulpo, un lacón o un trocito de empanada, recetas clásicas e irresistibles». Se puede pedir a la carta, elegir un estupendo menú del día con excelente relación calidad precio (13€), o compartir tapas y raciones. Buena selección de vinos gallegos. El local es feote, pero se compensa con la amabilidad del personal, que si no te puede dar mesa en el comedor se desvive por acoplarte en una del bar o en la barra. Una dirección a tener en cuenta en el barrio de Gros.
Calle del Padre Larroca, 2. San Sebastián · Guipúzcoa. Precio medio: 35 euros.
Es un bar de barrio en el centro de Gros que esconde un restaurante que se ha hecho famoso por sus chuletas, los pimientos y los tomates aliñados. En la barra una estupenda selección de pinchos calientes, entre los que destaca el pincho de foie-gras y las lecheritas fritas. En temporada buenos hongos. «Nunca falta el en recorrido, cuando salgo de pintxos con los amigos».
Travesía Rodil, 79. Falda de Ulía. San Sebastián · Guipúzcoa. Precio medio: 45 euros.
Puede que sea la terraza con mejores vistas de Donosti, y la comida acompaña, lo que no es poco, por eso se ha convertido en una de las referencias de cocina para los locales. Materia prima de calidad en platos moderadamente modernos, como los
tagliatelle begihaundi (calamar de ojo grande). Buenas instalaciones y bodega bien seleccionada. «Un lugar especial en el que disfruto mucho». Por eso es uno de los restaurantes favoritos de
Aduriz en Guipúzcoa.
Iparragirre Kalea, 13. San Sebastián · Guipúzcoa. Precio medio: 25 euros.
Una barra y media docena de mesas. A mitad de camino entre un bar y un restaurante. Ambiente cálido y confrotable, personal amable, uno de esos lugares que fidelizan a la clientela. » Es otro de mis bares de Gros. Me encanta el steck tartar» pero saben mucho de cocina y tratan bien los productos de temporada. Es un propuesta diferente a la que se encuentra en Donosti: burrata, cochinillo, cous-cous… «Son valientes y eso merece recompensa». Es otro de los restaurantes favoritos de Aduriz en Guipúzcoa.
Calzada vieja de Ategorrieta 3. San Sebastián · Guipúzcoa. Precio medio: 50 euros.
Txangurro al horno, almejas a la marinera, besugo… Cocina vasca 100% en uno de los jardines más bonitos de Donosti, ideal para cenar en verano. «Es el lugar perfecto para ir a celebrar algo especial porque además de buena comida el ambiente es muy agradable. Uno de esos sitios que gusta recomendar». Buena materia prima, tocada con acierto y servicio muy profesional son los secretos de este clásico.
Caserío Borda, Barrio Olaberria, 39. Irún. Guipúzcoa. Precio medio: 50 euros.
«Es uno de esos preciosos caseríos perdidos en mitad del bosque, además de comer bien se puede ver jugar pelota vasca«. Un restaurante tradicional que presume de buena materia prima: chuleta, cogote de merluza, rape, bacalao… y una gran tarta de queso, aunque la leche frita también tiene muchos adeptos. Al frente de la parrilla Iñaki Hernández.