Por quinto año consecutivo se celebra en San Sebastián Gastronomika el Campeonato Nacional de Ensaladilla Rusa. Y el ganador ya ha sido elegido: Castru Gaiteru, en Llanes. La mejor ensaladilla rusa está en Asturias.
De los ocho finalistas, este asador asturiano ha sido el elegido para ostentar el título a la mejor ensaladilla rusa de este año, que se lleva en mano el cocinero y propietario del restaurante Pedro Antonio Noriega.
En la foto aparece en el escenario de San Sebastián Gastronomika, feliz al recibir este premio tan especial para un plato que lleva en Castru Gaiteru desde que abrieron y que nunca falta en su carta. Después de tres años ganando ensaladillas malagueñas, el premio se ha ido al norte. Si la tradición no cambia, a partir de mañana comenzarán las colas a las puertas de Castru Gaiteru para probar la ensaladilla. La receta completa la publicaremos el domingo en nuestra sección de recetas, pero podemos adelantar que lo más singular es que la patata de la variedad Ágata, nueva y con muy poco agua, no está cocida sino asada en el horno y la mahonesa es Hellmann’s para evitar problemas. «La idea es como un puré de patata cremoso con mantequilla, pero cambiamos la mantequilla por mahonesa». Explica Noriega. Solo le añade aceituna manzanilla y una pizca de piquillo confitado, que apenas se percibe. Para terminar una buena ventresca de bonito.
Hevia (Madrid)
Bar FM (Granada)
Becerrita (Sevilla)
Castru Gaiteru (Llanes)
Bar Alegría (Barcelona)
La Taberna de Noa (Fuentes de León)
EatyJet (Vitoria)
Bar Pepe (Somo)
En su cuarta edición, Tragatá (Ronda), el bar propiedad de Benito Gómez (Bardal) que dirige Merche Piña se llevó el título a la mejor ensaladilla rusa de España. Al frente de la cocina está Daniel Moreno Zarzavilla, que fue quien la cocinó durante el evento. ¿Quién le sucederá en el título a la mejor de España de este año?
La ensaladilla ganadora del año pasado fue de corte tradicional, pero con la peculiaridad de que entre sus ingredientes tenía judías verdes picadas muy finas. Además agregaban el aceite de la conserva de ventresca y el jugo de las piparras, para darle más frescor. Desde hace unos años las guindillas vascas están sustituyendo a otros encurtidos como el pepinillo o a las clásicas aceitunas en no pocas ensaladillas.
*Fotografías: Julia Pérez
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