No hace falta que sea San Valentín para celebrar una cena íntima. Pero parece que la tradición se impone y a muchos les gusta demostrar su amor a fecha fija. Aprovechando que el 14 de febrero es el día elegido por Cupido para hacer de las suyas, hemos puesto en lista los restaurantes románticos de Madrid, al menos los que a nosotros nos lo parece. Imprescindible que no sean espacios enormes o que tengan muchas salas distintas -se agradece la intimidad- que la decoración acompañe -al menos que sea original- y que se coma bien, por algo somos una revista de gastronomía. Como seguro que se nos han olvidado algunos, iremos ampliando la selección.
Calle de Moratin, 36. Teléfono: 911 276 085. Precio: 40-60 €. Cierra domingos noche y lunes.
Este coqueto y acogedor restaurante del barrio de las letras es perfecto para una velada íntima. Sus estanterías cargadas de libros, sus mesas de madera, algunas en bastante aisladas, y su iluminación hacen que sea el escenario ideal para una cena en pareja sin que el presupuesto se dispare. Buenísima comida, con productos de temporada, excelentes vinos, muchos por copas, y un ambiente apacible que invita a la charla tranquila, repleta de confidencias y la contemplación. Si sois aficionados al vino, dejaros aconsejar por el sumiller, seguro que os descubre alguna joya. En la carta, sopa de tomate, puerros confitados con romesco, salmón ahumado, steak tartar… De postre tarta tatin. Un bistró para disfrutar.
Calle Conde de Xiquena, 4. Tel.: 912 79 16 01 Precio: 50-70 euros. No cierra.
Entre el crepitar fuego, el olor a brasa, las pieles y la cálida decoración es uno de los locales más lindos de Madrid, y eso que los Charrúa eran unos bravos guerreros que vivieron a orillas de los ríos Paraná y Uruguay. En este asador que lleva de moda desde que abrió no solo se come carne, también preparan deliciosas verduras, eso sí pasadas por el fuego, que es la seña de identidad del local. También hay una buena selección de ensaladas y un muestrario de carnes nacionales y de importación que, pasadas por la parrilla hacen las delicias de los aficionados. De postre los más golosos disfrutarán con el volcán de dulce de leche. Es un buen lugar para descubrir vinos del otro lado de Atlántico, aunque la carta de referencias nacionales tiene un estupendo nivel.
Calle San Blas, 4. Tel.: 914 29 03 96. Precio: 40-50 euros. Abre todos los días.
Tal vez sea el escenario más íntimo y romántico de Madrid, a pesar del tamaño del local, aunque también se alquila para eventos y está super enfocado al turismo. Pero todo eso no impide que se pueda vivir una noche especial. Una vieja bodega subterránea llena de pasadizos y hornacinas con descarnadas paredes de ladrillo y vigas de metal, que recrea un escenario único. Cocina de corte mediterráneo, para pedir menú degustación o a la carta. Para sorprender a tu pareja pide una de las mesas que se encuentran escondidas bajo las bóvedas. Ofrecen un menú especial de San Valentín.
Calle de la morería, 17. Tel.: 913 65 11 37 Precio medio: 120 euros. Cierra domingos noche y lunes.
Tal vez sea el restaurante más diminuto de Madrid, pero en este caso el tamaño -pequeño- juega a nuestro favor. Buscamos espacios reducidos, discretos, donde no tengamos que compartir las conversaciones con una multitud. Al encanto del espacio, que además tiene anexo un famosísimo tablao flamenco -por si os arrancáis a bailar por bulerías- se añade el magnífico nivel de los platos que cocina David García. Desde que abrió sus puertas no ha parado de cosechar premios, entre otros 1 estrella Michelin y tres soles en la guía Repsol. Platos contemporáneos de inspiración vasca, elaborados con excelente materia prima y una técnica depurada. Propuestas moderadamente creativas donde el sabor es el vector fundamental: marmitako, foie-gras con extracto de cebolla roja, cocochas con salsa de tinta de chipirón… Solo ofrecen un menú degustación (95 € por persona sin bebida). La carta de vinos de Jerez es apoteósica porque Juan Manuel del Rey es un grandísimo aficionado y tiene botellas únicas en la bodega. Puedes leer la crítica aquí.
Calle de la Amnistía, 10. Tel.: 914 47 27 13. Precio medio: 90-110 euros. No cierra.
Cocina francesa de altísima calidad en un bistró clásico. El espacio es cautivador y la cocina no lo es menos, siempre que te gusten, la mantequilla y las salsas. Para empezar unas buenas ostras con champán. Después, paté de campaña, caracoles o una sopa de cebolla. Y para terminar un lenguado meuniere, ¡come il faut! antes de llegar a los postres y probar el suflé Grand Marnier. Ofrecen menú degustación (85 euros por persona sin bebida). En la carta, maravillosos vinos franceses, algunos a precios muy razonables. Por encargo preparan solomillo Wellington para dos personas, una buena opción para celebrar San Valentín, o cualquier cosa… Al final lo importante es celebrar ¿o no?
Calle de Espronceda, 33. Tel.: 913 30 76 99. Precio medio: 120-150. No cierra.
Entre los restaurantes románticos de Madrid, sorprende Pilar Akaneya porque es romanticismo en clave japonesa. Un espacio exclusivo, escondido, donde disfrutar casi en privado (algunas mesas se ocultan por completo) de la compañía y de los placeres de la auténtica carne de wagyu, en concreto el Kobe Beef A5 o el Matsusaka Beef Rancho Ito, importado por los propietarios del local. Comer al rededor de un sumibiyaki, es decir una parrilla japonesa, preparando uno mismo las piezas de carne y otros ingredientes al instante tiene su encanto. Es una forma original y diferente de celebrar una velada íntima especial, mientras se descubren ingredientes tan poco comunes como el Crown Melon, ese melón japonés por el que se pagan fortunas. Ofrecen tres menús (90€, 140€ y 390€, este último incluye el exclusivo Matsisaka Beef). Para beber, buena seleccción de sakes, pero también cervezas y vinos españoles.
Matsusaka beef Ito Ranch Lomo
Calle Zurbano, 36. Tel.: 917 02 16 50. Precio medio: 60-80 euros. No cierra.
Sofisticación y clasicismo a partes iguales en este elegante comedor del Hotel Santo Mauro. La Biblioteca es un bombonera, ideal para una velada romántica. La cocina sin perjuicios y un poco canalla de Rafa Peña, cocinero del restaurante Gresca de Barcelona, que hace dos años se hizo cargo del restaurante, hará de contrapunto y pondrá ese punto de locura que una velada íntima necesita. Platos de la cocina clásica francesa como el pethivier de pichón, alternan con el cabracho al horno o los callos a la madrileña. Para empezar, ostras, almejas, anchoas o el omnipresente caviar. Los postres son versiones actualizadas de clásicos como el Paris Brest. Una bodega muy interesante, que os puede hacer beber más de la cuenta, pero en ese caso, siempre se puede reservar una habitación… Y seguir la fiesta.
Hotel Ritz Mandarin Oriental Madrid. Plaza de la Lealtad, 5. Tel.: 917 01 67 67. Precio desde 115 €. No cierra.
Una propuesta divertida, atrevida y muy original. Reservar en la sofisticada barra del champán bar del Hotel Ritz Mandarin Oriental y disfrutar el un menú de seis bocados (ostra, caviar, cigala, papada ibérica…) diseñados por Quique Dacosta y una copa de champán (115 € Por persona). Es una locura que no se hace todos los días, y por eso es perfecta para una celebración. Si esto resulta demasiado atrevido, siempre se puede resevar mesa en Deessa (2*) y dar cuenta de un menú completo en el elegante comedor.
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