AA Mirgin Exeo Evolució +2008, un cava de altura para estrenar el 2020 a lo grande
Un estupendo vino burbujeante
A la hora de echar mano a un gran espumoso que sirva para pasar página, quemar el almanaque ya desfondado, desatascar las uvas que han quedado atravesadas en el gaznate cuando estábamos –una vez más– pendientes de las 12 campanadas, pero, sobre todo, disfrutar de un estupendo vino burbujeante que esté a la altura de las circunstancias que tanto valor simbólico conlleva despedir un año y dar la bienvenida a otro, las alternativas son, ya lo sabemos, numerosísimas.
Apasionados de todos los vinos del mundo que valgan la pena, en El Bar de Gastroactitud.com no hacemos ascos a ningún origen, tipología ni método. Pero como no podemos abarcarlo todo, debemos guiarnos por la pituitaria, el instinto y –cuando no– el capricho a la hora de recomendar una botella que resulte adecuada para un momento tan trascendental como el último descorche del año.
Así, como no podemos ser justos, seremos al menos arbitrarios. Y nos decantaremos por uno de los mejores espumosos que hemos catado en los últimos meses: Mirgin Exeo Evolució +2008, la gema más reciente que ha presentado uno de los productores más diferenciados y exigentes del vino burbujeante catalán, Alta Alella.
En pleno cisma del cava, cuando muchos de sus mejores elaboradores han abandonado la D.O., esta pequeña bodega fundada por el sabio Josep Maria Pujol Busquets y asentada en la comarca de Alella, al norte de Barcelona –en una zona marginal al corazón del producción tradicional de los espumosos– está dando paradójicamente más alegrías al Consejo Regulador que muchas de las bodegas clásicas de Sant Sadurní d’Anoia.
Valga como ejemplo este notable Gran Reserva, elaborado con uvas de las variedades pansa blanca (60%) –sinonimia local de la uva que en el Penedès se conoce como xarel.lo– y chardonnay (40%) de un viñedo privilegiado, actualmente calificado como Cava de Paraje Vallcierera. Tras una primera fermentación en barricas de roble francés, se ha aplicado el método tradicional champenoise con una segunda fermentación en botella y 10 años de crianza de en rima.
Este largo proceso ha dado lugar a un espumoso de burbuja viva y delicada, expresión aromática muy elegante, con notas florales, melosas, de membrillo y fruta escarchada y un paladar amplio, profundo y esplendoroso, con llamativa persistencia. Un cava enorme que compite sin complejos con cualquier champagne de gran categoría.
Nada mejor para estrenar el año como manda el dios Baco