The London nº1 Sherry Cask, ginebra británica con acento jerezano
En el cada vez más vasto universo de la ginebra, seguramente la especialidad menos manida sea la de los gins envejecidos en barrica. Y también la menos comprendida, puesto que los destilados de esta categoría que han reposado cierto tiempo en vasijas de roble presentan un carácter más complejo y especiado, ciertamente contradictorio con el uso más habitual que se les da a las ginebras: el popular gin&tonic.
Pero como no es este popular combinado la única razón de ser de esta bebida espirituosa, bien vale la pena atreverse con las ginebras maduradas en barrica, variante no precisamente nueva –la tradición de criar este destilado en roble se remonta al menos hasta dos siglos atrás–, pero que en los últimos años parece haber resucitado, al menos como capricho excéntrico o ejercicio de estilo de algunas marcas.
El último en llegar al mercado es The London nº1 Sherry Cask Gin, que tiene la particularidad de estar añejado en botas de Jerez que albergaron previamente al famoso fino Tío Pepe. Hay que decir que la conjunción entre el carácter del excelente gin londinense y el alma del popular vino generoso no es casual, ya que ambos elixires llevan la firma del mismo grupo, el jerezano González Byass.
Como ya advertíamos, no es el gin&tonic el destino ideal para este Sherry Cask Gin británico con acento andaluz, que aúna las sensaciones balsámicas del enebro y demás botánicos con los matices especiados y vinosos que aporta la madera envinada en fino. Armónica, elegante y compleja, con el alcohol muy bien integrado, esta ginebra ofrece lo mejor de sí en cócteles magistrales –y minimalistas– como el dry martini, e incluso se disfruta con placer si se bebe sola, o acompañada sin más por unos cubos de hielo, un golpe de soda y una rodaja de limón. Cheers… ¡y olé!