Pimientos asados en casa ventresca de bonito
Una sabrosa ensalada, adecuada para cualquier época del año. Los pimientos una vez asados se pueden poner en conserva, lo mismo que la ventresca de bonito.
El chef: Francis Paniego
Heredero de una importante saga de hosteleros es el gran renovador de la cocina riojana. Reparte su vida entre Echaurren, el establecimiento familiar de Ezcaray, donde tiene su restaurante, El portal de Echaurren, y Tondeluna el gastrobar de Logroño.
Ingredientes
- 1 aguacate
- Cebollino y sal
- hojas de escarola y lollo rosso
- 6 cebolletas asadas
- 1 ventresca de bonito de 600 g
- aceite de oliva virgen extra
- 500 g de pimientos rojos
Preparación
Los pimientos
- Lavar los pimientos y colocarlos en una placa de horno con un poco de aceite y agua, para que así puedan soltar bastante jugo Introducirlos en el horno a 150 º durante 40 minutos dependiendo del tamaño del pimiento, ir dándoles vueltas para que se hagan uniformemente.
- Una vez asados dejar reposar, en las placas donde han sido asados y tapar, para que se terminen de hacer con su propio calor.
- Dejar enfriar, pelar y colar el jugo que han soltado; cortar en tiras del mismo tamaño, montar los platos y reservar hasta el momento del pase en la cámara.
La ventresca
- Asar la ventresca a 180º durante 12 minutos.
- Retirar la tela que las cubre y separar las lascas de bonito con cuidado de que no se rompan.
Presentación
- Calentar el plato de los pimientos en la salamandra para quitarle la sensación de frío.
- Colocarlos junto a las lascas de bonito, unas hojas de escarola y lollo rosso.
- Acompañar con las cebolletas asadas troceadas y dados de aguacate.
- Aliñar con aceite de oliva virgen extra, sal y cebollino picado.