Cocina colombiana a la que sobran pretensiones y falta sabor en un discreto local del centro de la ciudad
Bueno, bonito y barato. Así es la nueva La Maruca Castellana. El restaurante, que abre desde el desayuno a la cena, incita a repetir visita con frecuencia para disfrutar de su cocina casera y saludable a precios moderados.
Juanjo López es el artífice de esta taberna madrileña. Un local como los de toda la vida que supone una reivindicación de la tradición gastronómica capitalina en pleno barrio de Retiro.
¿Dónde está? ¿Cómo es? ¿Qué comer? ¿Con quién ir? ¿Cuánto cuesta? Seguro que las respuestas a estas preguntas te interesan.
Menú degustación con sabores potentes En un pasillo del popular Mercado de Vallehermoso encontramos este restaurante dirigido por Roberto Martínez Foronda y el grupo Tiradito.
En esta nueva etapa, Macarena de Castro se expresa con total libertad. Utiliza productos mallorquines pero no apela a la memoria gustativa del territorio. En un espacio perfecto para la alta cocina, da rienda suelta a su imaginación, que solo se doblega a la tiranía del sabor. Combinaciones llamativas en platos escuetos pero poderosos.
En el centro de Denia, con vistas al mar y el mejor producto de la lonja y la huerta, cocinado sutilmente, lo justo para realzar lo mejor de cada ingrediente. Una apuesta sugerente en un espacio que invita a volver.
Juanlu Fernández, tras diez años como jefe de cocina de Aponiente, abre su propio restaurante en Jerez de la Frontera (Cádiz). La gran cocina clásica interpretada por un gran cocinero andaluz.
Con el Cantábrico como telón de fondo, comer en una de las mesas de la galería del Real Balneario de Salinas es un espectáculo, fuera y dentro del plato. Alta cocina que sabe a mar aliñado con salsas clásicas, puntos de cocción perfectos y técnica depurada.
En plena sierra alicantina, el cocinero Kiko Moya ahonda en los sabores populares y cocina el paisaje. Platos que surgen de la reflexión y el estudio, en los que ingredientes humildes se hacen poderosos.