El panorama de los vinos blancos en España ofrece alternativas cada vez más diversas e interesantes. Que desde luego van más allá del albariño y los verdejos que se encuentran por doquier. Porque en este país se producen blancos en en regiones variopintas, con multitud de variedades, lo que da como resultado un amplio abanico de registros de aromas, sabores y texturas.

La España blanca, cada vez más diversa

Lo más interesante de este panorama es que es cada vez más rico. En las distintas comarcas vinícolas, los viticultores de las nuevas generaciones se están esforzando en recuperar variedades olvidadas o poco frecuentadas. Y también abordan nuevas variables de elaboración, recuperando muchas veces métodos ancestrales de viticultura, vinificación y crianza. Esto da lugar a un mosaico muy interesante de vinos en la nueva «España Blanca».

10 vinos blancos singulares para sorprender

1- Edición Limitada Garnacha Blanca 2022

Bodegas Montecillo
DOCa Rioja
PVP: 17,90 €
75 cl
Haciendo honor a una trayectoria de 150 años, la bodega riojana Montecillo continúa afinando la calidad de sus vinos, al mismo tiempo que suma nuevas referencias, como es el caso de este nuevo blanco de edición limitada, en el que ofrece el protagonismo absoluto a una de las variedades más minoritarias del viñedo de esta prestigiosa región: la garnacha blanca, que actualmente apenas representa un 3,96% de la extensión de las uvas blancas y un 0,96% del total en la DOCa. Pero que es capaz de ofrecer vinos de perfil muy elegante, con sutiles notas florales, matices minerales y frutales, como este que presenta Montecillo como novedad.

2- Colina Triste Blanco 2022

Vinos Sinceros
DO Arlanza
PVP: 12,23 €
75 cl
La comarca de Arlanza depara cada día mejores sorpresas. Una de ellas es este insólito blanco, que Luis Martín, mentor del proyecto de Vinos Sinceros, ha bautizado con el nombre de uno de los escenarios del entorno, donde se rodó la célebre western El bueno, el feo y el malo. Se trata de un blanco pleno de carácter, con formidable estructura y buena carga frutal, que asocia albillo, viura, malvasía y chasselas, entre otras variedades. Un vino de imagen y concepto rompedor, que no deja indiferente.

3- Dominio de Atauta Albillo Mayor 2022

Dominio de Atauta
DO Ribera del Duero
PVP: 31,90 €
75 cl
Uno de los más interesantes entre numerosos blancos que se han incorporado a la oferta de la Ribera del Duero desde que la DO admitió esta tipología en su reglamento, a partir de 2019, exclusivamente a partir de albillo mayor. En el valle soriano de Atauta, un alto porcentaje de las cepas prefiloxéricas eran de esta variedad, pero fueron reinjertadas con tempranillo a mediados del siglo pasado cuando la producción se orientó a la elaboración de vinos tintos. No obstante, algunos injertos no cuajaron y continuaron ofreciendo racimos de uva blanca, que los viticultores descartaban.

Destinaban a su propio consumo o mezclaban con las tintas en pequeñas proporciones. En el año 2020, Dominio de Atauta decidió seleccionar todas esas cepas de albillo mayor, para elaborar un vino blanco, contabilizando un total de 10.526 cepas, repartidas en 131 parcelas, en una superficie registrada de 3,10 hectáreas, con una edad media de 135 años. Un patrimonio vinícola de enorme valor que ha dado lugar a este vino, que ya va por su tercera añada. En 2022, la producción apenas superó las 10,700 botellas, de un blanco algo hermético cuando se sirve en la copa. Pero que luego exhibe gran personalidad y elegancia. Un gran vino blanco con nítidos rasgos varietales.

4- El Helechal 2022

Viñas Serranas
Sin DO (Sierra de Salamanca)
PVP: 22,90 €
75 cl
Hete aquí otra pequeña gema que hará las delicias de los que buscan rarezas y vinos poco manidos. Se trata de un blanco de tono subido, casi anaranjado, procedente de uno de los territorios menos explorados del viñedo peninsular, la Sierra de Salamanca. Más específicamente, el municipio de Garcibuey. Y está elaborado con una variedad propia de esa comarca: la rufete blanca. Con una paciente crianza en barricas de 500 litros para subrayar su carácter maduro y herbáceo. Único.

5- Mataperezosa 2020

Fuentes del Silencio
VT Castilla y León
PVP: 26,90 €
75 cl
Tras firmar una serie de tintos notables, el equipo de Fuentes del Silencio, liderado técnicamente por Marta Ramas cuajó también desde la añada 2018 este interesantísimo vino blanco. Mataperezosa surgió después de que la enóloga se aplicara a la labor de separar la uva blanca de la tinta en los viñedos más viejos de la propiedad en las 120 parcelas de viñedo que se asientan a los pies del monte Teleno, en Herreros de Jamuz (León), un lugar donde el imperio Romano tuvo un importante yacimiento aurífero.

De allí la calificación de auroterroir que le ha dado la empresa californiana Biome Makers, calificándolo como uno de los terroirs más excepcionales del mundo. La selección de los racimos de doña blanca y palomino (apenas 3.000 kilogramos) y una vinificación minuciosa, de carácter casi experimental, dio lugar a este blanco finísimo, de resonancias anisadas, herbáceas y con delicados acentos florales, que no revela su paso por barrica más que su buena consistencia en el paso por la boca, donde tampoco ha perdido nervio, tensión y longitud.

6- RM El Día 2022

Raúl Moreno
Sin DO (Cádiz)
PVP: 40,45 €
75 cl
Uno de los jóvenes viticultores más interesantes de cuantos están emergiendo del contexto del viñedo gaditano, Raul Moreno se distingue de sus coetáneos –y coterráneos– por muchos rasgos y detalles. Y sirva este blanco de ¡chardonnay! para demostrarlo. Porque cuando casi todos los productores de esta rica región vinícola están consagrados en explorar las posibilidades de la palomino y –en todo caso– en recuperar variedades locales de uva olvidadas, como la perruno; Moreno, además de ello, no reniega de las llamadas «variedades nobles», uvas foráneas como la syrah, la pinot noir o la propia blanca borgoñona, con la que ha conseguido este vino profundo, mineral y persistente, sin el añadido de sulfitos. Un grandísimo blanco gaditano de nueva generación.

7- NOC Viognier 2023

Bodegas NOC
VDT Castilla
PVP: 10,80 €
75 cl
Con la dirección técnica de Ignacio de Miguel, la bodega toledana de Carlos Galdón continúa sorprendiendo con vinos tan amables como este blanco de viognier, reposado durante cinco meses sobre sus lías para que la variedad típica del valle de Ródano revele sus típicos matices florales, recuerdos de albaricoque, melocotones y notable intensidad. Un vino fresco, goloso y diferente en el contexto de los blancos manchegos.

8- Patrick Murphy Bota Valentina 2017

Santiago Jordi / The Wine Hunter Company
VDT Cádiz
PVP: 32,75 €
75 cl
Joven enólogo consagrado a los asuntos administrativos, Santiago Jordi ha presidido la Federación Española de Asociaciones de Enólogos y actualmente está al frente de la Unión Internacional de Enología. Pero en los últimos años se ha aventurado a elaborar sus propios vinos en su Cádiz natal, en diversos proyectos. Algunos de los más interesantes llevan la etiqueta Patrick Murphy y recuperan antiguas tradiciones vinícolas, como la de los vinos de pasto: blancos de pagos nobles, envejecidos en botas envinadas con vinos generosos pero que prescinden del encabezado. Valga como ejemplo este Bota Valentina, 100% palomino fino del pago Macharnudo Alto con crianza biológica de 24 meses en bota de amontillado. Un vino blanco singular, pleno de carácter, largo, seco y profundo. Hay que probarlo si se tiene la ocasión. Bota única e irrepetible.

9- La Llorona 2022

Verónica Ortega
DO Bierzo
PVP: 30,60 €
75 cl
La gaditana Verónica Ortega, que se ha revelado como una de las viticultoras más dinámicas e interesantes del panorama emergente del Bierzo, presenta este blanco rico y pleno de carácter, elaborado con racimos de godello de grano pequeño, que crecen en un viñedo de 35 años, en el pueblo de Pieros, a 500 metros sobre el nivel del mar. Criado meses en barricas de diversa capacidad, La Llorona es un vino fresco, con tensión, identidad y persistencia. Sabroso y muy gastronómico.

10- La Oxidativa

Pagos de Villavendimia
VDT Castilla y León
PVP: 38,90 €
75 cl
En el pueblo vallisoletano de La Seca, los hermanos Vidal Soblechero sacan partido a los mejores majuelos de verdejo de las fincas de su familia para elaborar vinos tan singulares como este blanco criado en damajuanas, de crianza perpetua, procedente de viñas plantadas hace más de 80 años. Un blanco complejo, labrado por el tiempo, que no resiste comparaciones.