Hace ya cinco años que los hermanos Romero -Ricardo y Mané- conquistan a locales y visitantes desde Colósimo (Ortega y Gasset, 67. Madrid. Tel. 91 453 14 25. www.colosimo.es). Empezaron a hacerse notar con su famosísima tortilla de patata ‘concebollista’, y desde ahí enamoran a cualquiera que pruebe sus cremosas Croquetas de puchero, la Ensaladilla suave y una buena mayonesa, los Chipirones rellenos de sepia y caldo de coñeta, el Steak tartar… hasta llegar al Tocino de cielo o la Tarta de quesos y Payoyo. Ahora, a estos clásicos inamovibles se suma una selección de refrescantes elaboraciones. Que es la excusa perfecta para volver, una y otra vez, a este restaurante con zona de barra, sala y terraza.

Foto detalle de Atún con tomate

Uno de los recién llegados a la carta es el Tomate de huerto y atún rojo escabechado con emulsión de tomate. También, con este ingrediente, en plena temporada, un plato muy veraniego: el Pastel de atún encebollado, acompañado de una mayonesa de ajillo y brotes. Completan las novedades saladas unos ligeros Espárragos con velouté de puchero, que, al igual que ocurre con las croquetas, nos llevan de viaje directo al sur.

Como es habitual en el recetario de estos chiclaneros, son propuestas ideales para compartir y poder probar diferentes platos. Ya que su carta apetece de principio a fin. En la parte dulce han incorporado unas sugerentes Fresas con nata, y de nuevo, la sencillez del nombre nada tiene que ver con lo que esconde… recomiendan comerlas de abajo hacia arriba para ir descubriendo todos los matices. ¡Para repetir!

Pastel de atún encebollado

Para acompañar la veintena de platos, tienen otras tantas referencias por copas. Diez de las D.O. más reconocidas del país y otras diez de olorosos y generosos del Marco de Jerez y de la provincia de Cádiz, sin olvidar el vermú personalizo de la casa, de Montilla Moriles y estrella indiscutible a la hora del aperitivo.

Colósimo abre a las 11 de la mañana, y a esa hora su tortilla de patata con cebolla es la reina de la barra, acompañada de un café, que va dando paso a las cañas bien tiradas y a su aromático vermú según pasan las horas. La zona de barra cuenta además con mesas altas y es perfecta para las comidas más informales. Aunque si se va en busca de una sobremesa, la zona del salón con sofás y una agradable iluminación, resulta perfecta. La otra opción es la demandada terraza, en la que este verano, como novedad, también habrá mesas altas.