Son muchos los argumentos que dan razón al éxito del Bar Manero y ahora socio de Mar Mía, el establecimiento que el restaurador Carlos Bosch inauguró en el centro de la ciudad de Alicante, en 2018, y replicó en Madrid en 2021. Los productos que ofrecen ambas sucursales con la marca Manero sin duda forman parte de la identidad y la filosofía que el propietario quiere imprimir a la imagen y el quehacer de la casa. Los hay de todo tipo, desde turrones y salazones hasta caviar y aceite de oliva virgen extra. También hay vinos bajo la marca Manero.

Lo que se lleva la palma es el vino. La selección supera ya las 32 referencias –y espera otras 17 más que están por llegar–, por lo que los vinos etiquetados con el logotipo Manero compiten ya con el resto de los vinos disponibles en las cartas de los establecimientos de esta casa en Madrid y Alicante.

Carlos Bosch, «A mi Manero»
A la pregunta de si esta gama de vinos propia resta negocio a bodegas y crea conflicto con los distribuidores del ramo, Bosch es más que explícito: «Las bodegas están encantadas de trabajar conmigo en este terreno, porque hay que dejar claro que no etiquetamos para Manero vinos que salen al mercado con otras marcas, sino que siempre creamos nuestros propios coupages, con un un estilo o un sello personalizado. Desde esa perspectiva, no quitamos negocio a nadie y alimentamos el interés por el mundo del vino», explica el propietario de Manero. «Por otro lado, esta actividad es mi hobby, me permite visitar bodegas, encontrarme con bodegueros, crear mis propios assemblages y presentar viticultores como José María Vicente, de Casa Castillo, y Pepe Raventós. Ellos nunca se habían visto y ahora trabajan conmigo haciendo vinos especiales para Manero, lo cual es un auténtico lujo».

Pepe Raventós, Carlos Bosch y José María Vicente, de Casa Castillo

Los vinos de Manero en Sanlúcar
Con el mismo entusiasmo, Carlos Bosch describe su experiencia cuando se abocó a la búsqueda de vinos en el Marco de Jerez. «Otra experiencia fascinante ha sido la que he vivido en Sanlúcar de Barrameda. Siempre he querido tener una selección especial para Manero de vinos de Jerez, pero no la he encontrado hasta visitar Sanlúcar. Allí, en 2019, justo antes de la pandemia, tuve al suerte de conocer a Gabriel Raya, quien me introdujo en la Bodega Argüeso, de Paco Yuste, donde pude realizar mis primeras selecciones de manzanilla: una de 7 botas y otra de una sola bota de la añada 2017 ¡que es sencillamente espectacular!»(Uno que la ha probado puede corroborar que esto es cierto).

Carlos Bosch marcando su bota de manzanilla en Sanlúcar de Barrameda

Raros y asequibles
Los vinos de la selección de Manero, que incorporan algunas referencias más asequibles, como un Ribera del Duero de viticultura ecológica elaborado por la bodega Arzuaga o un Rioja del mismísimo Marqués de Riscal, también pueden comprarse para llevar a casa, tanto como el raro Treixadura 2017 criado sobre lías de Jorge Pérez (Ribeiro) o el fabuloso monastrell de Casa Castillo que Carlos Bosch ha tuneado con un porcentaje de garnacha para diferenciarlo del soberbio Pie Franco (Jumilla) que acaba de pasar a la historia con 100 puntos Parker en la añada 2020. Otro de los vinos más singulares y atractivos de Manero es el Orange de viticultura natural que Pepe Raventós elabora en exclusividad para los restaurantes de Bosch. Que no son solamente las dos sucursales de Manero, ya que los vinos que llevan esta etiqueta también se comercializan en los otros establecimientos que ha impulsado este inquieto restaurador, en concreto el wine bar El Portal Taberna en Alicante y el flamante Mar Mía de Madrid, donde Bosch comparte el emprendimiento con Rafa Zafra (Estimar).

Treixadura en Velo de Flor 2017, un vino de Jorge Pérez con Carlos Bosch, de los más raros e interesantes del catálogo de Manero.