La mayoría de los pueblos celebran sus fiestas patronales en verano, pero además en muchos lugares tiene lugar otro tipo festejos, estrictamente gastronómicos, que por miles congregan a vecinos y visitantes en torno a calderetas, paellas gigantes, productos y platos típicos, ya sea en un medio urbano, en el campo o en la playa. He aquí algunas de las fiestas gastronómicas más clásicas. Nuestras favoritas junto con diferentes fiestas del vino que se celebran más adelante.

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Las mejores fiestas gastronómicas de España

Fiesta del Carneiro al espeto. 26 de julio. Moraña (Pontevedra)

Declarada de Interés Turístico, este año celebra su XLVI edición. Es una comida campestre en la que más de 100 carneiros (corderos de 12-14 Kgs.) se asan en espetos, al estilo de los gauchos argentinos, abiertos en canal sobre una doble cruz de hierro . En largas mesas situadas en una carballeira (robledal) se degustan lotes para grupos de 20 comensales, que incluyen un carneiro, empanada de trigo, de bacalao, pan, 12 botellas de vino y salsa para aliñar la carne, además de café y servicio de mesa. El importe: 300 euros. Reservas de lotes en 986.553.005 y en la propia web.

Fiesta del Cangrejo de río. 2 agosto. Herrera del Pisuerga (Palencia)

Ya va por la XLIV edición. El cangrejo de río, producto emblemático en la localidad (el americano; el autóctono está prohibido pescarlo), se convierte en protagonista de una paellera gigante, utensilio que se utiliza para prepararlos guisados, a la manera tradicional (4 euros el plato con pan) en el parque del pueblo. Ese día se celebra asimismo un concurso de cangrejos vivos (gana el de mayor tamaño) y se entregan los premios del concurso de cocina de platos de cangrejo (uno para aficionados y otro para profesionales). En los actos oficiales el nombramiento del Caballero y Dama de la Festiva Orden del Cangrejo, y un divertido desfile con la falla del cangrejo, que se quema esa misma noche a las 12 en la plaza de toros.

Noche marinera en Calella. 25 julio. Calella (Barcelona)

En el Pº de Manel Puigvert, frente a la playa,  21 años lleva organizándose esta noche de música y gastronomía, que recuerda a los que tiempo ha, emigraron a Cuba. Se preparan sardinas asadas a la parrilla, que se toman acompañadas de vino, refrescos y “cremat” (bebida caliente a base de ron), mientras se escuchan habaneras en directo en un escenario preparado para la ocasión. Para comer, platos de sardinas con pan, cebolla y aceitunas,  todo servido en mesa. La recaudación va a beneficio de la Cruz Roja de Calella.

Feria de la Urta. Del 31 de julio al 2 de agosto. Rota (Cádiz)

Declarada de Interés Turístico de Andalucía. Se celebra en el recinto ferial, donde se montan casetas que permiten comer, a precios populares, arranque roteño (una especie de gazpacho), butifarra de la zona, tintilla (vino típico dulce),  tapitas… Y el domingo 2, por la noche tiene lugar el concurso de urta a la roteña (un delicado y sabroso pescado, típico del Estrecho), el plato más significativo de la gastronomía local, con degustación gratuita. Para amenizar la fiesta, todas las noches se organizan numerosas actuaciones musicales en el patio de casetas.

Festa de la Empanada en Allariz. 22 y 23 agosto. Allariz (Ourense)

Desde 1971 tiene lugar esta fiesta, que se celebra en el Campo de Vilanova, a la vera del río Arnoia. Allí vecinos y visitantes se reúnen  para comer un sinfín de empanadas dulces y saladas (carne, atún, langostinos, chocos, vegetales, frutas…) en numerosos puestos. Es la muestra más variada de empanadas que se desarrolla en toda Galicia (producto al que le dedican fiestas gastronómicas otras localidades gallegas como Chatada, A Rúa, Silleda, As Nogais, Ferrol, etc.) También se puede tomar pulpo, churrasco y ribeiro. La fiesta se inicia a las 12, y dura hasta la noche, terminando con un concierto de música folck. Precios populares.

La Gran Judiada. 25 agosto. La Granja de San Ildefonso (Segovia)

En la Pradera del Hospital, junto al campo de fútbol, más de 10.000 personas dan buena cuenta de mil kilos de judiones con todos sus aditamentos (chorizo, morcilla, oreja, panceta). La fiesta –que coincide con San Luis, patrono de la localidad- empieza a las 5 de la mañana, cuando se prenden con fuegos artificiales la leña sobre la que se colocan los enormes perolos de judías, que han permanecido a remojo en un pilón toda la noche. A las 14,30 empieza la comida, y dos horas más tarde, la “canutada” (una mascletá con más de mil petardos). De preparar esta gran judiada se encargan profesionales de la Asociación de Cocineros de Segovia.

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